Carod-Rovira, el castellano y el amazig

Para Carod-Rovira la lengua de los bereberes, el amazig, “es parte del patrimonio cultural de Catalunya“. Jamás se le ha escuchado decir nada así acerca del castellano, sino todo lo contrario. Para Carod-Rovira el castellano es una lengua de colonización, invasora y extranjera. Recuerden el revuelo que armó cuando salió la famosa ley de la tercera hora de lengua castallana, que implantaba en la educación primaria tres horas en lugar de dos dedicadas a la enseñanza del idioma.

No es el primer desaguisado de este tipo que comete el señor Carod-Rovira. Ya el año pasado tuvo la ocurrencia de ir a celebrar el fin del Ramadán en la sede del Consejo Islámico de Catalunya. Si se le invitase a asistir a una procesión de Semana Santa seguramente se negaría a ir a un acto tan “facha” y “carca”. Pero ir con los moros a celebrar el fin del Ramadán es muy progre, y por lo tanto, aunque también se trate de religión, ahí no se puede faltar. Porque el Islam, amigos lectores, es progre según los progres, a pesar de la mentalidad retrógrada, ultraconservadora y fascista de esa religión. Es verdad eso que los extremos se tocan.

Y puestos a recordar, también recuerdo a otra progre, esta anónima, que salió en televisión cuando se desarticuló una banda islamista en el Raval que pretendía atentar contra el metro de la capital catalana. Comentando el hecho que los islamistas se reunían en un local habilitado como mezquita para tramar los atentados, la progre soltó: “nosotros siempre hemos defendido que aquí se viene a rezar”. Y lo dijo con cara y voz de progre tonta y sorprendida, sin acabr de entender cómo era que sus amiguitos oradores en vez de rezar preparaban una matanza.

Lo que les pasa a los progres es que están cargados de complejos. Para ellos todo lo occidental es malo, malvado y destrucitvo. El Cristianismo es carca, los curas fachas, los obispos mafiosos, la colonización un crimen contra la humanidad, Bush el diablo y Aznar un tarado. Sin embargo, quieren ver al Islam como diversidad religiosa, la filosofía oriental como su máxima de vida, Obama como un ángel y Zapatero como el mejor gestor que jamás ha tenido España, porque es progre como ellos. Y así va el país.